13 AÑOS DE CRÓNICAS EN ‘CATALIBANES’ 

Madrasas


El diputado autonómico Albert Rivera muestra públicamente, el 24 de noviembre 2010, un cartel colgado en las paredes de las aulas de acogida para inmigrantes: ‘Pacto: prometo que siempre hablaré en catalán. Si tengo alguna duda, pediré ayuda a las profesoras. Me esforzaré mucho para hablar siempre en catalán’; y el lugar y la fecha (26 de octubre de 2009), seguidas de la firma del alumno

Traducción: ‘Queridos Reyes Magos de Oriente: me gustaría que me cumplieseis estos deseos: que los niños y niñas se curen, que haya paz en el mundo y el universo, que los españoles nos dejen en paz’


Barracones del Instituto Escuela Sant Jordi de Navás (Barcelona), con una pancarta donde dos estelades flanquean el eslogan: ‘La escuela en catalán ahora y siempre’

Participantes en la Via Dos niñas con simbología política viajan en autocar hacia la cadena humana separatista (Via Catalana) convocada en la Diada del 11 de septiembre de 2013

Cartel en el Colegio Betania, en Cornellá de Llobregat, Barcelona. Traducción: ‘Hablemos en catalán en el patio’. Según el artículo
10.4 del decreto 142/2007 de la Generalidad, el recreo es una actividad educativa integrada en el horario lectivo del alumnado y,
por lo tanto, está también sujeto a los rigores e imposiciones de la inmersión lingüística

Trabajo de la asignatura de Inglés realizado por los alumnos del sexto curso
de Primaria del colegio El Carme-Vedruna de Manlleu (Barcelona), centro
religioso concertado. Traducción de la letra:

«Cataluña corre hacia su futuro.
Cataluña corre hacia su libertad.
Cataluña, un nuevo Estado en Europa.
Cataluña lucha por su futuro.
Todo eso es lo que realmente queremos en Cataluña.
Montserrat, montaña de la Virgen negra;
Mediterráneo, el más bello mar;
La Pedrera de Antonio Gaudí.
Todo eso es lo que realmente queremos en Cataluña.
La sardana, nos tomamos de las manos en círculo;
El pan con tomate, una comida muy especial;
La senyera siempre está en nuestro corazón.
Todo eso es lo que realmente queremos en Cataluña».


Menores de edad uniformados con camisetas de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y portando banderas separatistas, expresan su apoyo a la secesión en un reportaje de TV3 sobre la cadena humana dirigido al publico infantil y emitido en el informativo Info K, el 12 de septiembre de 2013

Un análisis de la Gigafoto ofrecida por los organizadores de la Vía Catalana tras ensamblar informáticamente las instantáneas captadas en los 400 kilómetros de su recorrido reveló que, de los 793.683 participantes (nada de dos millones, como habían proclamado), más de 130.000 eran niños

Juego de estuche de rotuladores y camiseta de niño para colorear, con la bandera separatista y la consigna: ‘Cataluña, nuevo Estado de Europa’

Un grupo de niñas aguardan en Montroig (Tarragona) el autocar que las trasladará a la cadena humana montada para la Diada del 11 de septiembre de 2013

Manualidad escolar: ‘Que los de fuera de Cataluña no nos roben más el dinero’, seguido del nombre del niño, el curso (2º) y la clase a las que pertenece


Tablero del Juego del camino hacia la independencia,
pasatiempo infantil de casillas y dados similar a la Oca

Juego de la hoja de ruta hacia la independencia, con las
principales fases y protagonistas del proceso secesionista

(Transcripción íntegra del reportaje sobre adoctrinamiento nacionalista de la infancia y acoso escolar publicado en
El Mundo, el 16 de septiembre de 2015, por Germán González):
‘Eres una españolita de mierda’
■ La tensión por el proceso soberanista coloca a los alumnos en el centro del conflicto político
■ Una familia denuncia el acoso que sufrió su hija de siete años por llevar un escudo español
Durante año y medio, I., una niña de siete años, fue acosada por sus compañeros de clase en un colegio de Sabadell. Su único pecado fue llevar una bandera catalana en el cuaderno de lengua catalana y un escudo de España en el de lengua castellana. A partir de ahí empezó su calvario y tuvo que aguantar comentarios ofensivos de sus compañeros, como «tú no eres catalana, españolita de mierda».

«Tus padres son una mierda porque son españoles y si vuelves a hablar en castellano te tiro por la ventana», fue otro de los comentarios que tuvo que soportar la niña, en este caso delante de una profesora.


Reportaje publicado en la edición en papel
del diario El Mundo del 16-09-2015
Con esta presión, no es de extrañar que la menor «sufriese taquicardias, fuese más de 10 veces al lavabo y no pudiera dormir sola por las noches», explica su padre, Antonio Hernández, quien indica que el problema sólo se solucionó cuando la cambiaron de colegio.

La niña, que sufrió este acoso a finales de 2012, «tuvo que ir a muchos especialistas: psicólogos, neurólogos, nefrólogos, digestólogos y cardiólogos», destaca el padre. Lamenta este hombre que el colegio no tomase ninguna medida para impedirlo e incluso que les dijeran que «no era para tanto». «Mi hija sufría insultos a diario, amenazas e incluso numerosas agresiones y me llegaron a decir que era un reflejo de la sociedad», destaca el padre de I., quien recuerda que el acoso no acabó ahí.

«Ya hace más de un año y medio que mis hijos abandonaron el centro. Pues esta primavera, mi hija se encontró por la calle a sus antiguos compañeros que la acosaban. No importó que estuvieran profesores delante», asegura Hernández.

La situación que sufrió esta familia de Sabadell podría ser el primer acoso de este tipo que termina en una denuncia en los juzgados, ya que los padres, asesorados por Convivencia Cívica Catalana, han puesto el caso de su hija en manos de sus abogados, que esperan los informes forenses. Hernández dice que no quiere un «centro de adoctrinamiento» para sus hijos, pero destaca que los menores no saben «si Cataluña es más grande que España, las comunidades autónomas o los ríos y montañas principales de España».

En los últimos años, coincidiendo con el auge del fenómeno soberanista, la crispación en las aulas se ha incrementado de tal forma que toda la presión ha recaído sobre los alumnos castellanohablantes y sus familias. Las peticiones de una escolarización del 25% en castellano y los ataques que han recibido los padres por ello son un buen ejemplo. El más reciente es el de una madre de Balaguer (Lérida) que ha cambiado a sus dos hijos de escuela por las presiones sufridas por sus vecinos tras reclamar el bilingüismo. [1] Según denuncia, el centro «ha revelado los datos» de su familia y «ha vulnerado los derechos» de sus hijos.

Cambio de colegio

En el mismo caso está otra familia de Mataró, a la que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña permitió tener el 25% de clases en castellano, pero que se vio forzada a cambiar a los niños de colegio por la presión del centro y de los vecinos. [2]

Padres y profesores indican que el proceso de difusión del ideario soberanista también está en las aulas. Una de las razones que motivó la entrada de Rafael Arenas a Societat Civil Catalana, entidad de la que es vocal, es que «el adoctrinamiento supera lo admisible», como pudo comprobar cuando su hija hacía 5º curso y le enseñó su libro de Medi, que engloba la materia de Historia. «En 60 páginas de la Historia de Cataluña, de la Prehistoria a la Baja Edad Media, no había ninguna referencia a España o Hispania, y eso que Tarraco fue provincia de Roma», comenta Arenas, quien asegura que esta forma de enseñar evita todo lo referente a España a propósito.

Arenas acudió a quejarse a la directora del centro e incluso le argumentó que en el libro había «errores de bulto», como retrasar 70 años las invasiones de los pueblos bárbaros. «La directora me dio la razón y acabaron el curso con fotocopias de otros libros que explicaban la Historia de Cataluña de otra forma», indica Arenas, quien asegura que «tienes que estar atento y quejarte, aunque luego debes encontrar gente razonable en el colegio». Por eso, lamenta que los padres deban «cargar con la tarea» de vigilar los contenidos, cuando debería ser trabajo de la Inspección de Educación.

Durante 15 años, Teresa Ginés fue maestra en varios centros de Tarragona. Desde su experiencia cree que «con la excusa de crear una nación se niegan a las familias derechos fundamentales, como reclamar una enseñanza bilingüe». Destaca que desde los centros se ha llegado a «presionar a las familias» que piden una educación en las dos lenguas y se les «hace sentir culpables», asegurando que su hijo estará discriminado. «Hay un proceso invisible» en la formación de los niños que «está muy estudiado», destaca Ginés, quien asegura que, por ejemplo, se empieza catalanizando los nombres de los niños cuando entran al colegio. Más adelante se usan los libros de texto, en los que «hay un desconocimiento de que Cataluña pertenece a España».

«Es muy subliminal, con los niños de familias que no son nacionalistas consiguen que interioricen que la identidad catalana es excluyente de la española, es soy catalán y no quiero ser español», asegura Ginés, que considera que este «objetivo oculto» del soberanismo «lleva consigo mucho odio». La maestra destaca que bajo «la apariencia de la defensa del catalán se busca un adoctrinamiento y que los niños asuman un conflicto lingüístico». Además, cree que la situación se «ha agravado mucho en los últimos años», porque entre el profesorado hay gente vinculada a las entidades soberanistas. «Cualquiera que reclame está condenado a sufrir odio y presión», asegura.

Carlos Silva, profesor de inglés en un instituto de l'Hospitalet de Llobregat, explica que los alumnos de Primaria son «la punta de lanza» del adoctrinamiento nacionalista. El profesor se ha encontrado con libros de texto en los que se omite el nombre de España en las ediciones que se hacen para Cataluña, diferenciándolas de las del resto del país. Silva explica que en su instituto han aumentado los alumnos que llevan simbología independentista, cuando hasta hace unos años no había en l'Hospitalet. Además, indica que uno de los momentos de más tensión fue durante las votaciones del pasado 9-N. «Fue un punto de inflexión», señala, porque «la dirección nos preguntó quién quería participar y se creó un clima entre nosotros de ver los que estaban o los que dejaban de estar».

Convivencia Cívica ha lanzado una campaña por el bilingüismo para este curso, por lo que difundirá información en los centros y asesorará a los padres que deseen una educación en catalán y castellano.

Niños ataviados con simbología separatista posan junto a los consejeros Andreu Mas-Colell (Economía y Conocimiento), Felip Puig (Empresa y Empleo) y Neus Munté (Bienestar Social y Familia) en el primer sorteo de la lotería de la Generalidad de Cataluña —La Grossa de Cap d'Any, (‘la Gorda de Fin de Año’)—, celebrado el 31 de diciembre de 2013

Dos hermanas gemelas de cortísima edad,
paseadas en su carrito con sendas bufandas decoradas con la bandera secesionista o estelada (‘estrellada’)

¡In, inde, independencia! El proceso de Cataluña hacia el Estado propio explicado a los niños, libro de la editorial Cossetània, de venta recomendada para edades de entre 9 y 12 años. Compuesto por 72 páginas, con ilustraciones, está encuadernado en rústica y tiene un prólogo de Carme Forcadell, quien lo presenta así:
«Este relato pretende explicar qué significó la Diada del once de septiembre de 2012 para muchos catalanes y catalanas que, desde hace tiempo, trabajamos y soñamos con la libertad de nuestro país. Expone las experiencias y las vivencias personales, pero a la vez colectivas, de muchas personas, y lo hace de manera sencilla, natural y comprensible para que los niños y niñas puedan comprender qué pasó aquel día, el día en que salimos a la calle para cambiar la historia.
»De la misma manera en que nuestros infantes deben conocer los problemas y las dificultades de la vida cotidiana, también deben conocer las inquietudes y los anhelos de independencia de nuestro pueblo, porque ellos son el futuro, ese futuro que todos deseamos mejor, más justo y más digno. Serán ellos quienes tendrán que contribuir de manera extraordinaria a la construcción del nuevo Estado catalán».
En una reseña, el diario El Punt Avui lo ha definido como «independencia para pequeños».


Niños de corta edad, luciendo banderas separatistas en la
manifestación celebrada en Barcelona el 10 de julio de 2010

Manifestación por el centro de la Ciudad Condal, el 9 de julio de 2011, que concluyó con un discurso de Heribert Barrera

Póster del libro Abecedario de la independencia, publicado en 2014 por la editorial La Galera para niños a partir de 4 años de edad. En palabras de sus creadores, «cada letra tiene un motivo identificable con el proceso soberanista (Asamblea, Burro catalán, Consulta, etc.)». A: Assemblea Nacional Catalana (ANC). B: Burro català (‘burro catalán’, raza autóctona que ha devenido en símbolo nacionalista). C: Consulta. D: Dret a decidir (‘derecho a decidir’). E: Estelada (‘estrellada’, bandera separatista). F: Festa (‘fiesta’). G: Generalitat. H: Història. I: Independència. J: Sant Jordi. K: Kilòmetre 0 (‘kilómetro 0’). L: Llibertat (‘libertad’). M: Manifestació (‘manifestación’). N: Nou Estat de Europa (‘nuevo Estado de Europa’). O: Òmnium Cultural (la entidad subvencionada que estuvo presidida por Muriel Casals y junto con la Asamblea Nacional Catalana organiza las manifestaciones separatistas). P: Parlament (‘Parlamento’). Q: Quatre barres (‘cuatro barras’, las de la bandera catalana). R: República. U: Urna. V: Via Catalana (nombre dado a la cadena humana de 2013 por la secesión). W: Webs catalanes (‘webs catalanas’). X: Xarxes socials (‘redes sociales’). Y: Catalunya. Z: Zig-zaga (‘zigzag’, ilustrado con dos niños esquivando una Constitución y otro libro más en cuya tapa pone «Transición. Tribunal Constitucional»)


Manifestación en la Diada de 2012 en Barcelona


Vía Catalana, 11 de septiembre de 2013


Imagen colgada en el grupo de Facebook CATALUNYA, T'ESTIMO (‘CATALUÑA, TE AMO’), con esta explicación: «Os hago llegar un dibujo hecho por una alumna mía. Los niños escuchan, los niños sienten y lo transmiten como saben y/o pueden... :-)))»