13 AÑOS DE CRÓNICAS EN ‘CATALIBANES’ 

31 de diciembre de 2018

Navidad kitsch

Alentadas las masas desde la Generalidad para generar en las calles un conflicto tal que doblegue al Estado (recordemos a Quim Torra y su: «A vosotros, amigos de los CDR, que apretáis y hacéis bien en apretar»), el proceso separatista ha terminado derivando, hacia la guerrilla urbana o carrer borroka por un lado (del catalán, carrer, ‘calle’), con violencia organizada como la vista recientemente el 21-D (el canal en YouTube asociado al blog recoge vídeos de aquellos y otros disturbios: 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 22, 23); y hacia el frikismo delirante por el otro, del cual estas festividades están dejando muestras sorprendentes.

Paranoia, religión, fanatismo, política, tradiciones. En grotesca amalgama. Las siguientes imágenes pueden ampliarse entre 1'5 y 3 veces pulsando encima, para una óptima visualización de cada detalle. Arrancamos:


Este es el aspecto que presentaba la plaza Fra Bernardí de Manlleu la noche del 24 de diciembre. Mientras, en el Ayuntamiento de Calella —foto de la derecha— han decidido tirar la casa por la ventana con tan espectacular decoración de su fachada. Ambos municipios pertenecen a la provincia de Barcelona.


En Folgarolas (Barcelona), imponiendo la ideología a toda la población con cargo al contribuyente. Como ya todos saben, el amarillo, y más concretamente el lazo de ese color, han sido escogidos para simbolizar el apoyo a los imputados por el golpe de Estado del 1 de octubre de 2017.

La historia de Tárrega (Lérida) es una de las muchas que desmienten que Cataluña fuese invadida y colonizada en 1714, bulo fundacional del nacionalismo. Porque al igual que sucedió con otras muchas localidades catalanas, sus pobladores combatieron a favor del aspirante Borbón, Felipe V, en la Guerra de Sucesión por el trono de España. Hoy sin embargo han montado allí este singular abeto, de donde, a falta de bolas, penden los retratos de los prófugos y los procesados a la espera de juicio en prisión preventiva.


Inquietante. No se sabe si es un homenaje a Pizza Hut... O a Ed Gein, célebre asesino en serie americano aficionado a ensamblar porciones de sus víctimas, que inspiró a los guionistas de El silencio de los corderos y La matanza de Texas. Y lo del lazo en la nariz resulta insuperable. Sigue circulando durante estas fechas aunque su diseñador, llamado Oriol Bargalló, lo subió hace ya algunos meses a Twitter y a su blog personal, donde más fotomontajes suyos de idéntico gusto aguardan a quien ose entrar. Lo de al lado es un christma sin autoría conocida para felicitar las fiestas por Internet.


Acudir a una farmacia buscando remedio para la jaqueca provocada por la tabarra de los de la esvastelada, y encontrarse con esto.


Entrada de la sede del Departamento de la Vicepresidencia y de Economía y Hacienda de la Generalidad, con una especie de altar erigido a Oriol Junqueras y donde no falta una estrella por supuesto amarilla coronando esa especie de árbol. El edificio está situado en la Rambla de Cataluña, 19-21, de la ciudad Condal; y fue en su interior donde las multitudes convocadas por Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, presidentes de la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y de Òmnium Cultural respectivamente, retuvieron durante casi 24 horas entre el 20 y el 21 de septiembre de 2017, a los guardias civiles que estaban efectuando un registro ordenado por el Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona en el marco de la Operación Anubis. La otra instantánea ha sido tomada también en unas dependencias del Gobierno autonómico.


Cada uno de los lazos de esta decoración navideña lleva escrito el nombre y el apellido de un cabecilla del 1-O.


Aquí, algo que podríamos denominar secesionismo gastronómico, con esa impactante presentación de la mesa (de las que quitan el apetito) y la forma dada al mazapán.


Desde que Pedro Sánchez trasladara a la cárcel catalana de Lledoners los imputados por el golpe de Estado, como parte del pago al nacionalismo por investirle presidente del Gobierno, el área circundante se ha convertido en escenario cotidiano de los más diversos numeritos y lugar de concentración donde se permite (y se promueve) cultivar el victimismo. Ambos momentos son del pasado 23 de diciembre.


El anochecer de ese mismo día 23, los organizadores elevaron consignas a bordo de dos globos aerostáticos también allí, en el exterior de la prisión.


A los retratos que lúgubremente adornan este árbol les han superpuesto unos barrotes. El otro está en el vestíbulo de un bloque de viviendas.


El Tió de Nadal es una antigua tradición catalana consistente en rellenar con dulces y golosinas un leño hueco antropomorfizado que, el día de Navidad y al grito de caga Tió!, la chiquillería vacía de su anhelado contenido arreándole unos bastonazos de mucho cuidado. Pues bien, a este de lo han puesto a ingerir líquidos únicamente para solidarizarse con los políticos que por aquel entonces mantenían una huelga de hambre en prisión. Mas no han corrido mejor suerte los de la imagen contigua, que entre rejas están experimentando en su corteza los rigores asociados a la privación de libertad. Quien ha colgado ambas imágenes identifica el lugar como Mura, un pueblecito de Barcelona, con 227 habitantes.


Otro tronco concienciado políticamente, luciendo gorro y lacito amarillos. Y los perpetradores de lo de al lado ya lo han mezclado todo: el peseeebre, la Virgen María, los pastorcillos, el buey, una chapita con un eslogan... El ángel anunciando la Buena Nueva, un churro arriba sustituyendo a la acostumbrada Estrella de Belén... La verdad es que se termina cogiéndoles cariño por estos buenos ratos que nos dan.


Este otro Nacimiento va un paso más allá, con el Niño Jesús acostado sobre la reproducción de una urna como las utilizadas en el referéndum ilegal. A mí me parece ya hasta blasfemo. Y para finalizar este acuario instalado en un restaurante de la comarca de Osona, con un lazo amarillo enjaulado recibiendo la visita de los Reyes Magos de Oriente.

(Todas las fotografías proceden de las redes sociales, donde siguen publicadas).